Dependiendo del tipo de vehículo que conduzcas y su antigüedad, las reparaciones de la transmisión pueden ser costosas.
Pero existen una serie de precauciones a tener en cuenta para el mantenimiento del cambio automático, que te ayudarán a extender la vida útil de tu transmisión automática y evitar fallos en la transmisión.
10 Consejos de mantenimiento del cambio automático
1. Verifica el líquido de tu transmisión periódicamente.
En muchos automóviles, revisar el líquido de transmisión es tan fácil como controlar el aceite del motor.
Si el nivel de líquido es bajo, puede tener una fuga. El fluido en sí debe ser de un color rojo brillante, claro, y debe oler dulce. Si es turbio, de color oscuro y su olor es similar a pescado podrido, deberías llevarlo a un especialista en transmisiones automáticas.
2. Utiliza el ATF específico para tu vehículo.
Es conveniente consultar el manual del fabricante para determinar qué tipo de fluido de transmisión debe usar. Si después de hacerlo aún no estás seguro, puedes contactar con nuestro departamento técnico. Recuerda que disponemos de ATF’s homologados para el 85% del parque de vehículos europeo.
3. Revisa periódicamente el sistema de refrigeración de tu motor.
El sistema de enfriamiento del vehículo ayuda a prevenir el sobrecalentamiento del motor.
¿Pero sabías que también asegura que el fluido de la transmisión que bombea a través de la caja también se enfríe?
Es probable que necesites una reparación de la transmisión antes de que el motor se sobrecaliente por completo, por lo que es fundamental que te asegures de que el sistema de refrigeración del motor esté en condiciones óptimas.
4. Haz que tu transmisión se lubrique regularmente.
La duración del ATF de tu coche dependerá del tipo de conducción, la temperatura de funcionamiento y el número de kilómetros. Pero de manera general, se aconseja realizar una sustitución entre los 60.000 y 80.000 km.
5. No cambiar de velocidad mientras tu coche esté en movimiento.
Asegúrate de detener tu vehículo por completo antes de cambiar de «conducción» a «marcha atrás» o viceversa. Si no lo haces, estarás forzando la transmisión pudiendo llegar a provocar una avería con el paso del tiempo.
6. Deja que tu vehículo se caliente antes de conducir.
Siempre es aconsejable calentar el motor unos minutos antes de comenzar a conducir, especialmente durante los meses de invierno.
7. Evita conducir con una rueda de repuesto durante un período prolongado de tiempo.
Tamaños de neumáticos desiguales, o conducir con una rueda de repuesto pequeña durante un período prolongado, no solo dañará otras partes de tu vehículo, sino que después de un tiempo, ejercerá una presión innecesaria sobre la transmisión.
8. Cambia regularmente el filtro de la transmisión.
En función del tipo de vehículo, el filtro de la transmisión se encuentra externo, de manera que se puede sustituír, o interno, el cuál no puede ser cambiado.
Para estos casos, recomendamos realizar el mantenimiento a los 60.000 para asegurar la calidad del ATF. En los vehículos en los que existe la posibilidad de reemplazar el filtro, realizaremos el mantenimiento, de manera general, a los 80.000km.
9. Evita el uso de tu vehículo para remolcar cargas pesadas.
Usar tu coche de manera habitual para remolcar cargas pesadas, puede hacer que el fluido de la transmisión se oxide o queme y, a su vez, cause averías en la transmisión.
10. Revisa tu caja de cambios automática anualmente.
Desde TCmatic, aconsejamos realizar una revisión anual de la transmisión por fugas y otras anomalías , así como controlar periódicamente la calidad del ATF. Un buen mantenimiento, alargará la vida de tu vehículo evitando averías.